Soul Garden no solo buscaba ese tono de los años 30-40 en Illinois, momento en el que nacía el jazz. Además quería destacar por encima de cualquier otro pub de su zona. Como imagen quería hacer notar que es un sitio con identidad y raíces. Así llegamos a esta solución que no solo presenta un aspecto distinguido, elegante y atractivo, sino que reinventa la imagen del pavo real y la hace suya como seña de identidad.

A la hora de escoger el color, queríamos mantener el degradado lo máximo posible, puesto que la fachada es un luminoso imponente. Y el contraste del blanco con el negro da el toque de elegancia que buscábamos.